¿Estamos haciendo lo suficiente para preservar la salud de nuestro planeta? Parece que no. Tanto los gobiernos como cada uno de nosotros tenemos mucho que hacer todavía. Recordarnos eso es uno de los principales objetivos de las Naciones Unidas a la hora de celebrar una jornada como esta.
La acción del hombre sobre la naturaleza y sus consecuencias (cambio climático, pérdida de la biodiversidad, desertificación o deforestación) afectan seriamente a los ecosistemas que permiten la vida en la Tierra. Y entre los factores que tienen una incidencia muy importante está la forma en la que nos alimentamos: la ganadería y agricultura intensiva y la utilización de productos contaminantes afectan a la posibilidad de conseguir o no los objetivos climáticos marcados por los organismos internacionales. ¿Cuál es la situación actual? En este informe interactivo puedes consultar la situación respecto del calentamiento global.
El sector de la alimentación representa en torno al 22% del total de las emisiones de gases de efecto invernadero. Además, desde comienzos del siglo XX, ha desaparecido cerca del 75% de la diversidad de cultivos existente. El impacto de los sistemas alimentarios sobre la salud del planeta es tal que el Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres ha convocado para el próximo mes de septiembre una Cumbre sobre los sistemas alimentarios.
Todos tenemos algo que hacer en beneficio de la Madre Tierra. Las decisiones que tomamos y el estilo de vida que llevamos tienen consecuencias, aunque no seamos conscientes de ello. Y nuestra salud, nuestra vida, en definitiva, depende de la salud de la Tierra. ¿Qué estamos haciendo para preservarla? ¿Quieres saber con qué pequeños gestos puedes contribuir? Pincha aquí y lo descubrirás.