Un tercio de los alimentos que se producen en el mundo se pierden o se desperdician. Y con ellos, infinidad de recursos: desde el agua y las semillas hasta la energía empleada en su transporte y elaboración. Esto implica enormes consecuencias para el medio ambiente, ya que el desperdicio de alimentos aumenta las emisiones de gases de efecto invernadero y contribuye al cambio climático. En medio de tanto alimento que va a parar a la basura, hay millones de personas en el mundo para quienes comer es un reto diario. ¿Qué puedes hacer tú para que tu alimento no sea parte de las toneladas que se desperdician diariamente?
- Compra consciente
La FAO sugiere que no compres más de lo que tu familia necesite a fin de reducir el riesgo de desperdiciar alimentos innecesariamente. No te dejes llevar por las ofertas, piensa realmente si vas a consumirlo. En un restaurante, ordena de forma racional para evitar que sobre alimento. En caso de que haya sobrado, llévatelo a casa.
- Compartir es cuidar: done alimentos para ayudar a los demás
Si tienes un alimento que está en perfecto estado pero que no vas a consumir, dónalo. Siempre habrá alguien que estará feliz de recibirlo.
- Aprende a amar a los alimentos feos
Muchas frutas y verduras se descartan en las tiendas solo por el hecho de que incumplen unas normas cosméticas arbitrarias, como no tener la misma forma, tamaño o brillo que las demás. El sabor es el mismo, ¡no dejes que esa fruta o verdura vaya a parar a la basura!
- Comprueba los alimentos de la nevera
No pierdas de vista los alimentos frescos y planifica tus comidas para que no tengas que desechar nada. Para ello, es importante entender las fechas en las etiquetas de los alimentos. Recuerda que “Mejor consumir antes de” no significa “Desechar después de”, aunque la calidad del producto puede ser inferior. ¡Evalúa sus calidades antes de descartarlo!
- Convertir el desperdicio en compost
¿Sabías que el compostaje doméstico puede desviar hasta 150 kg de pérdida de comida por hogar al año? Si no cuentas con un compostador en tu hogar, tira los alimentos orgánicos en el contenedor marrón.
Reducir la pérdida y el desperdicio significa respetar los alimentos, los recursos naturales, el esfuerzo y las inversiones que estos han requerido. ¿Quieres incorporar más hábitos de este tipo? Aquí tienes más información. ¡Haz del #NoDesperdicio de comida tu forma de vida!