El pasado viernes la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) anunció que en marzo los precios mundiales de las materias primas alimentarias alcanzaron los niveles más altos de su historia, ya que la guerra en la región del Mar Negro extendió la conmoción a los mercados de granos básicos y aceites vegetales.
El índice de precios de los alimentos de la FAO promedió los 159,3 puntos en marzo, un 12,6 % más que en febrero, su nivel más alto desde su creación en 1990. El índice rastrea los cambios mensuales en los precios internacionales de una canasta de productos alimenticios habitualmente comercializados.
El precio de los cereales y aceites vegetales
Los precios mundiales del trigo se dispararon un 19,7% en marzo. Mientras tanto, los precios del maíz registraron un aumento intermensual del 19,1%, alcanzando un máximo histórico junto con los de la cebada y el sorgo.
Por otra parte, el índice de precios del aceite vegetal de la FAO aumentó un 23,2 %, impulsado por cotizaciones más altas del aceite de semilla de girasol, del cual Ucrania es el principal exportador mundial. Como resultado, los precios del aceite de palma, soya y colza también aumentaron notablemente.
Imagen: FAO